lunes, 17 de febrero de 2014

Y otra, y otra, y las que hagan falta.

Vais a perdonar que vuelva a escribir ya tan pronto, que no sea nada original ni sorprendente lo que vayáis a leer aquí...pero es la manera que tengo de sacarlo fuera, y a nadie debiera por ello pedir yo perdón.
No siempre lo original y lo nuevo es lo mejor, a veces hay cosas que simplemente son tan grandes, que hay que repetirlas una y otra vez =)


Es cuando sonrío después de suspirar perdido porque siento que tengo ganas locas de componerte una canción...pero mis dedos se tropiezan tontos con las cuerdas de mi guitarra, incapaces de hacer sonar una melodía que me convenza, una melodía que mi corazón considere que hace justicia a lo que te quiero decir, lo que él siente.
Y así pasan los minutos, yo sintiendo mucho ahí dentro, queriendo y creyendo ser capaz de escribirte la canción más bonita que se haya escrito jamás... y mis dedos quebrándose entre cuerda y cuerda, mi voz enmudeciéndose con el vacío de tu ausencia. Porque la canción más bonita que se escribirá jamás, no es otra que la que hace tus labios cuando tocan en mi boca, la que hace tu mano cuando busca la mía al caminar, la que hace tu mirada cuando me miras y quieres de todo menos hablar.

Y así paso a veces los minutos e incluso las horas, tratando de encontrar una música que no existe sin ti, tratando de explicar en notas lo que en palabras no basta, lo que sólo entiende un corazón. Y aunque nadie ve los frutos nunca de aquello que no consigo componer, yo cada día tengo más claro que cuanto más ganas tengo y menos me sale, más te debo querer yo.
Y quizá te canses de leer tanto palabrerío, tanta rima sin ton ni son, pero créeme cuando te digo que no escribo por escribir, sino  que realmente hay algo que me hace sentir así, que hace que cada palabra escrita tenga toda una frase detrás, todo un recuerdo o toda una ilusión. Y ese algo no es otra cosa que recordarte cuando ríes, recordar al cerrar los ojos tu olor, ese algo no es más que sentir tu mirada de cerca, poder rodearte con mis brazos en cualquier rincón.

Lo que hace que escriba lo que siento, y que sienta lo que escribo... eres tú.


Y así me despido por hoy, con una entrada que no dice nada nuevo, una entrada que no tiene nada de especial...pero que mi pequeño corazón quería hoy contar. 

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